jueves, 10 de julio de 2008

DESENCANTO

Un tiempo llevo leyendo los titulares de la prensa local y pensando en el día del congreso riojano de los socialistas y, aún, enterándome de cómo van muchas cosas. Enterándome, y además, intentando entender tantos detalles que veo a mí alrededor a diario. No hay problema, apenas con los compañeros de militancia; acaso con alguno, a quienes veo con más similitud con los jefes, que con nosotros, el resto de compañeros. Serán los años que llevan allí, los que les han hecho actuar más cómo aquellos, y dejar de pensar cómo debían, creo yo; cómo todo el resto de la militancia de base.
No consigo animarme con éste congreso. Muchos años, haciendo cosas, y aquí, no consigo que me estimule, no hay apenas días en los que me vea a gusto ahí. Han sido años los previos en los que, teniendo líderes obviamente marcando directrices, primaba la autonomía, la iniciativa, la resolución, una independencia en el trabajo que, te marcabas unas pautas y ahí resolvías todo el tema pendiente. Y listo, perfecto. Consultas, algunas claro; dudas, a preguntar y listo y, sin más, tú adelante; se confiaba en ti, y eso estaba claro. Y respondías sacando un trabajo, lo más perfecto posible, manejabas claramente la situación y funcionaba.
Ahora, todo empieza a sonarme distinto. Parece que alguien esta empeñado en una militancia en la que, todo hay que preguntarlo, porque así lo quieren algunos. No decidas por tu cuenta, no sirve. Claro eres parte de la militancia que según la encuesta de hoy día 10/07/08, publicada en el diario La Rioja, me sitúa entre la militancia sin estudios, sin pedigrí y, por tanto, sin derecho a opinar. Como si la política estaría solo reservada a los que han tenido la oportunidad en la vida de estudiar, gracias a sus posibles o a su capacidad. Preguntar, y preguntar. Guiarte sólo por sus pautas, y sobra el resto. Actuar, pero bajo las órdenes explícitas y sin desviarte una coma. Esto, tras tantos años sintiendo que eras otra cosa, actuando de otra manera, te hace sentir autómata. Si, sé que no todo el mundo tiene la suerte de estar en algo que le gusta, que le encanta, que le hace disfrutar el día a día. Yo lo tuve, y por eso, esto, lo veo así ahora. No me resigno, no soy autocomplaciente, quiero seguir luchando por mis ideas y por ganarle al PP las elecciones.
Curioso, que siempre que se hacen encuestas a mi nunca me preguntan, no debo estar en las base de datos de los encuestadores de este país, pero me alegro porque en definitiva creo que son todas interesadas, porque todo depende de la forma de realizar las mismas. Tampoco formo parte de esa “corriente de rechazo” ni a los que están, ni a los que vengan, cuando lleguen. No he estado desencantado con la pelea, lo estoy con ciertas maniobras orquestales desde la sombra. Me molesta lo que considera el candidato a Secretario General Sufrategui, que dice: el PSOE de La Rioja necesita ampliar su electorado: «Por la izquierda se ha demostrado que caben muy pocos, así que hay que abarcar más por el centro y conectar con la gente». Pues bien, yo soy de izquierdas y lo centro siempre me ha sonado a milonga milonguera, así que, el que quiera centro que se vaya al PP, que no para de reclamar este espectro. Yo de izquierdas.
En fin, en unos días, llegan las vacaciones. Este año, ya vuelve a tocarme el mes completo. Iré a disfrutar y relajarme, cómo siempre, sé que me vendrán bien los días de descanso, lógicamente, cómo es lo normal. Pero, sé, que a partir del congreso, debería empezar a pensar qué hacer con mi militancia. En vacaciones descansaré, y pensaré, no me queda otra opción. Ya veremos