Probablemente será que con el precio que cobra de publicidad el diario La Rioja, no le alcanzarían las páginas para justificar lo que le da al Gobierno regional en publicidad “oficial” y “gratuita” a favor del Jefe PPedrone. Viene esto a cuento de que el diario La Rioja ha dado estos días de atrás una lección de cómo tener contento al Jefe. Muy propio de nuestra época. Muy propio del actual periodismo que se hace desde el mencionado diario. En recientes fechas el brillo de tal diario, se pudo observar en la forma y en el tratamiento informativo que se dió al día de La Rioja y las medallas que otorga PPedrone y el que se dió al día de San Bernabe y a las insignias que otorga el Ayuntamiento. Eso sí, el Jefe quedo satisfecho. Objetivo cumplido.Para PPedrone el día de La Rioja (dos páginas para el solito) y sus medallas todo el despliegue de medios y páginas del día siguiente. Para las fiestas de San Bernabé (por igual o parecido motivo, igual tratamiento, pero no, para el alcalde de Logroño Tomás Santos, cero páginas) y las insignias del Ayuntamiento lo justito y en un rincon. Fue suficiente. Para qué más. No creo que, de repente irían a cambiar la línea «editorial» y comenzaran a informar a los ciudadanos del éxito total de estas fiestas con presencia masiva de ciudadanos en la calle participando de las mismas en todos los actos, la recuperación del casco antiguo por parte de la ciudadania, ni de la importancia de las insignias que el Ayuntamiento entrego, ni del curriculum y de la trayectoria de quinenes las recibieron. Esos aspectos no eran relevantes para el Jefe Ppedrone, no vaya a ser que se molestara.
El diario La Rioja, nunca es neutral, (aunque proclamen que quieren ser imparciales), acerca de qué noticias proporcionar, cómo ofrecerlas, en qué momento, en qué contexto y con qué relevancia. También eligen entre acercarse lo más posible al núcleo de la noticia o dispersarse en anécdotas fragmentarias o distractivas, cuando no en la simple manipulación. Los trucos para “usar” la información son cuasi infinitos. Lo éticamente esencial del diario La Rioja seria tener voluntad de objetividad. En esas estamos también en La Rioja. A nosotros, nos toca discernir y evitar el engaño y la manipulación. Es posible y saludable hacerlo.
El diario La Rioja es de una autentica parcialidad, pues día tras día, esta al servicio del Jefe PPedrone, no le importa perder credibilidad, únicamente sirve como órgano de propaganda descarada de PPedrone y del PP, es increible el cuidado y esmero con el que magnifican las noticias del Jefe PPedrone y cuando no de la mano que le mece la cuna: Emilio del Rio “chulito de la rioja” verdadero manipulador en la sombra y ejecutor de las órdenes del Jefe, en detrimento de resto de formaciones politicas de la región, una autentica farsa. Cuando tendremos un diario plural y que por encima de todas las cosas nos de informacion. Yo no pierdo la esperanza, rectificar es de sabios.
Un buen ejemplo de servidumbre periodistica. Y luego decían… de otras épocas. Qué pena me da.
